Las cañas de bambú ofrecen un sinfín de posibilidades decorativas en el hogar y son capaces de aportar un exótico toque a cualquier parte de la casa, desde el salón o la cocina hasta la propia terraza, pasando por el recibidor, el dormitorio o incluso el cuarto de baño.
El bambú es un material relativamente económico, ecológico, resistente y muy preciado para los amantes de la decoración feng shui. Se trata además de un complemento decorativo muy versátil, ya que puede integrarse en todo tipo de ambientes: rústicos, clásicos, modernos, minimalistas... Para ello, puedes elegir entre conservar su color natural o pintarlo de blanco, negro o de un tono más llamativo, adaptándolo de este modo al color predominante en tu decoración.
Las cañas de bambú suelen usarse por lo general del mismo modo que las plantas secas, colocándolas dentro de un jarrón o un gran recipiente apoyado sobre el suelo, desde donde se elevarán para conseguir un llamativo y a la vez elegante resultado. Eso sí, el tamaño de este jarrón o recipiente deberá adaptarse al espacio en el que tengamos pensado ubicarlo, bien sea el centro de la estancia o un rincón libre junto a la pared.
Asimismo, las cañas de bambú pueden actuar también como separador de ambientes, ayudándote para ello de un macetero o un pequeño soporte sobre el suelo y otro en el techo para asegurar su fijación. De esta forma conseguirás separar distintas zonas dentro de una misma estancia de forma completamente natural. La cantidad de cañas empleadas para ello dependerá, obviamente, del espacio que haya que cubrir y del gusto de cada persona. En este sentido, lo mejor, como en todo, es aplicar el sentido común.
Son también un recurso usado con frecuencia para decorar una pared (adornándolas por ejemplo con un poco de follaje verde para lograr un bonito contraste de colores) o vestir la puerta del armario del dormitorio o la despensa de la cocina. Otra opción es utilizarlas como cabecero de cama, confiriendo de esta forma calidez y un aire rústico y acogedor al dormitorio. Y una tendencia cada vez más en auge es usar las cañas en forma de escalera de bambú como toallero en el cuarto de baño o como improvisado perchero en el dormitorio o el recibidor de la casa para colgar algunas prendas de ropa o complementos de vestir de madera informal. También podemos encontrar en el mercado, y sin ir más lejos en nuestra tienda online, lámparas de pie o de mesa de bambú, e incluso jarrones realizados a mano con este material.
Luego ya, dependiendo de la maña de cada uno/a, pueden hacerse todo tipo de manualidades con estas cañas, desde jaboneras hasta fruteros, pasando por marcos para fotos o espejos, candeleros y floreros naturales, lapiceros... El límite, como siempre, lo pondrá nuestra imaginación y creatividad.
Ya en la zona exterior de la vivienda, las cañas de bambú pueden emplearse para poner la guinda de oro a una zona chill out o simplemente para decorar o revestir las paredes de la terraza con el fin de ganar en intimidad, sobre todo en los casos de terrazas ubicadas a ras de calle o a una altura relativamente baja (aunque para ello, sin embargo, es más práctico y económico optar por finas cañas de bambú sintético), resultando especialmente recomendables en ambientes mediterráneos, ibicencos, etc. Del mismo modo, podemos usar cañas de bambú estrechas como soporte para ayudar a crecer a algunas plantas jóvenes que puedan tenga algún problema para alzarse de forma correcta o, por supuesto, para hacer lo propio con las plantas trepadoras.
Como ves, las cañas de bambú pueden dar mucho juego a la hora de decorar la casa y brindar a la misma un toque de personalidad y originalidad. ¿A qué esperas para sacarles el máximo partido?