Antes que nada, nos adelantamos a la pregunta más frecuente sobre las chimeneas ecológicas: sí, su fuego es completamente real, no es nada holográfico, aunque a veces pueda parecer lo contrario. Inventadas hace algunos años en Finlandia, estas chimeneas tienen bastantes ventajas sobre las tradicionales chimeneas de leña, e incluso sobre las eléctricas, por lo que no es de extrañar que cada vez se vean más y más modelos en el mercado.
¿Cómo funcionan las chimeneas ecológicas?
Las chimeneas ecológicas funcionan quemando etanol (alcohol etílico), disponible en tiendas de bricolaje y algunos supermercados. La combustión se produce en una caja llamada quemador, realizada normalmente en acero inoxidable y cristal, con un sistema que controla la altura de la llama y la intensidad del fuego, que puedes regular según tu gusto y necesidades. Estas chimeneas pueden permanecer encendidas hasta 20 horas seguidas, manteniendo siempre una llama bella y uniforme.
¿Por qué las chimeneas ecológicas son ecológicas?
Precisamente por el uso de alcohol como combustible. Estas chimeneas prescinden de leña y de otros productos derivados del petróleo para producir la combustión y, en consecuencia, no emiten humo, residuos ni olores.
Ventajas de las chimeneas ecológicas
No requieren ninguna obra ni instalación: tanto si son fijas como portátiles, se pueden colocar en cualquier sitio de la casa de forma muy sencilla, ya que no requieren ninguna salida o conducto de humos. Pueden instalarse en el suelo, sobre un mueble, integradas en la pared o incluso en exteriores.
Sostenibilidad: las chimeneas ecológicas no necesitan combustibles derivados del petróleo, ni tampoco leña. El bioetanol no contamina el aire con humo ni gases tóxicos, además de no producir olores.
Encendido y apagado muy sencillo: se encienden y apagan casi de forma instantánea, en ambos casos mucho más fácilmente que las tradicionales.
Sin suciedad: no producen ni cenizas ni polvo. Esto implica que las labores de limpieza y mantenimiento se reducen a las cómodas recargas de bioetanol.
Seguridad: estas chimeneas son mucho más seguras que las tradicionales, puesto que no representan riesgo de incendio, y si se usan correctamente, tampoco de sufrir quemaduras.
Diseño y estilo: brindan un evidente valor añadido a nivel decorativo al espacio en el que se colocan, aportando a este un interesante toque de estilo y distinción.
Versatilidad: las chimeneas de bioetanol coinciden con cualquier propuesta de decoración, desde las más clásicas a las más modernas, lo que les brinda una enorme versatilidad.
Obviamente, también hay que decir que son algo más caras que las tradicionales y eléctricas, pero pensamos la diferencia de precio vale la pena. Y tú, ¿estás convencido/a de las ventajas de las chimeneas ecológicas?