El colonial es, por muchos motivos, un estilo que nunca pasa de moda, o lo que es lo mismo: una apuesta segura en la decoración de interiores. No en vano, posee una capacidad innata para prestar calidez visual y física a la casa (cualidad que se agradece especialmente durante los meses más fríos), y sobre todo, para combinar la decoración clásica con toques elegantes y modernos, ya que reúne detalles de la cultura escandinava, británica, francesa o española, entre otras.
El estilo colonial gira en torno a un material que se erige como el auténtico protagonista de sus ambientes: la madera. Ya sea en mindi, acacia, mango, haya o fresno, entre innumerables variedades, la madera es el eje sobre el que gira un estilo en el que el nogal es, sin duda, el color predominante y el mejor aliado de este material.
Estas características convierten a los muebles coloniales en piezas sobrias, elegantes y de gran valor artesanal, ideales para conformar un hogar cálido y confortable en cualquier de sus estancias, desde el recibidor hasta el dormitorio, pasando por el salón-comedor, el vestidor u otra zona de paso.
Pero no todo se limita al empleo de la madera. El estilo colonial puede complementarse perfectamente con la presencia de muebles auxiliares realizados en bambú, ratán o mimbre, así como con objetos decorativos de casi cualquier índole, como cuadros, lámparas de pie o de mesa, candelabros, baúles...
También es frecuente el uso de accesorios textiles (principalmente lino o algodón) en forma de cojines, ropa de cama, mantas, etc. en tonos blancos, crema o beige que ofrezcan un atractivo contraste visual a las estancias, así como un tacto suave y agradable que incremente la sensación de calidez y confort en el día a día. Asimismo, las alfombras de fibras naturales, situadas estratégicamente a los pies de la cama en el dormitorio, bajo la mesa de centro del salón o cerca de la puerta en el hall recibidor pueden suponer la guinda perfecta a la decoración de estas dependencias.
Recuerda que en nuestra tienda te ofrecemos hasta cinco colecciones de marcado estilo colonial: Forest, Grace, Nature, Ohio y Amara. Si bien es cierto que comparten el mismo estilo, cada una de estas series cuenta con diferentes matices tanto en la variedad de la madera empleada para la elaboración de sus piezas, como en su diseño o el tono con el que han sido acabadas.