Las mesas auxiliares son cada vez más protagonistas en el salón comedor. Así lo vemos a diario en nuestra tienda online (son los muebles más vendidos), en las revistas de decoración y, en definitiva, en las tendencias de interiorismo. Y probablemente no es por un motivo en concreto, sino por la suma de varios:
Funcionalidad: Sin duda, uno los aspectos de los más importantes. Sin renunciar nunca al estilo y el diseño, la funcionalidad ha sido, es y será una de nuestras grandes obsesiones. Lógico y normal. La estética es muy importante, qué duda cabe, pero de poco o nada sirve si no va acompañada de comodidad en nuestro día a día en el hogar. Si tenemos una vida más o menos normal, lo más probable es que necesitemos un sitio para apoyar, por ejemplo, una lámpara de noche que nos ofrezca una luz tenue y agradable, el teléfono móvil, el mando del televisor, un libro, una revista... mil cosas. Somos personas y como tales precisamos miles de objetos para vivir con cierta comodidad.
Versatilidad: A diferencia de otros muebles, pueden colocarse en casi cualquier lugar. Junto al sofá, en un rincón, entre el sofá y la tele, bajo la misma, al lado de una puerta, de la cama.... Una polivalencia que juega mucho a su favor, ya que nos permite, si se da el caso y las circunstancias lo requieren, cambiar su rol o ubicación en un momento dado las veces que haga falta.
Fáciles de desplazar: Unido con el punto anterior, su (por lo general) escaso peso, nos ofrece la posibilidad de desplazar cualquier mesa auxiliar con relativa facilidad de un sitio a otro de la casa. Esto es una ventaja muy importante si, por ejemplo, nos cansamos de ellas o, como decíamos antes, queremos reubicarlas en algún momento.
Una compra implicación: Generalmente y salvo raras excepciones, las mesas auxiliares suelen resultar bastante económicas en comparación con otros muebles más 'contundentes', como los aparadores, vitrinas, estanterías o mesas de comedor, por citar tan solo algunos ejemplos. Esto las convierte en un artículo de baja implicación, ya que no nos comprometen a diferentes niveles (económico, estético, funcional, etc.) tanto como pueden hacerlo piezas de mobiliario como las citadas, cuya adquisición es más trascendente.
Variedad: Las hay para todos los gustos. No tienes que más que ver nuestro catálogo de mesas auxiliares para comprobarlo. Altas, medianas, bajas, grandes, pequeñas, de madera o de mármol, con o sin estantes, con o sin cajones, rústicas, coloniales, modernas, vintage, industriales... Su inmensa variedad de opciones les permite integrarse en cualquier tipo de casa y/o ambiente.
Estética: Todo lo comentado has ahora no está reñido con que su presencia tenga también ventajas a nivel estético. No vamos a descubrir ahora la belleza de infinidad de mesas de centro, mesas nido o telefoneras, poseedoras en muchos casos de encanto y personalidad como para parar un tren.
Como ves, la creciente pasión por las mesitas auxiliares no es precisamente fruto de la casualidad. ¡Son muebles que nos ofrecen mucho a cambio de muy poco!