De un tiempo a esta parte, el mueble TV se ha convertido en un elemento fundamental de cualquier salón. Lejos, casi extinguidos, quedan ya los inmensos muebles que ocupan la práctica totalidad de una pared de la sala de estar. Auténticos armatostes más propios de épocas pasadas que hacían de vitrina, armario y aparador al mismo tiempo, y que contaban con un hueco especialmente pensado para colocar los antiguos televisores de tubo. Todo tiene su momento. Hoy estos muebles ya no se fabrican. Ahora preferimos ahorrar espacio, optando por un mobiliario mucho menos invasivo.
El interiorismo actual apuesta por utilizar muebles más específicos y, en consecuencia, de dimensiones más comedidas. En este sentido, con el paso del tiempo, ese antiguo mueble de comedor se ha ido sustituyendo en muchos casos por un mueble de televisión al uso. Y en ello estamos. El mercado actual nos ofrece una amplísima gama de modelos de todos los estilos posibles.
La variedad de diseños es infinita, pero todos ellos tienen, por razones obvias una característica en común: un amplio tablero superior para colocar los alargados y estrechos televisores de hoy en día. A partir de ahí, todo lo demás es variable y opcional. Así pues, existen modelos extremadamente sencillos que cuenta tan solo con una balda abierta en su parte inferior para colocar los dispositivos complementarios con el televisor. Y es que esta balda o estante es otra característica muy importante. Podríamos decir que casi, casi, la segunda imprescindible.
Quien más quien menos, todos tenemos algún descodificador de alguna plataforma de televisión por pago o reproductor de DVD, Blu Ray o (los más nostálgicos) de VHS, aunque estos reproductores están ya en desusos, debido a que los televisores actuales cuentan ya con salidas de USB y HDMI que los hacen totalmente prescindibles. Lo que sí hay en muchas casas, por la presencia de niños y no tan niños, son videoconsolas, que también necesitan un espacio para ser ubicadas, que generalmente suele ser la citada balda.
Al hilo de esto, recuerda que, si este estante está solo abierto por su parte frontal, es muy importante que cuente con un agujero en su parte trasera para poder pasar los cables de estos dispositivos, ya que de lo contrario tendríamos que pasarlos por delante, dando lugar a un resultado muy poco estético.
Más allá de estos aspectos básicos, luego ya depende de cada uno optar por un modelo con puertas de armario o cajones para ganar espacio de almacenaje y dar así cabida a pequeños objetos auxiliares, como pueden ser pilas de repuesto para los mandos a distancia, álbumes, documentación y, en definitiva, cualquier cosa que quieras guardar a buen recaudo. Del mismo modo, también se puede jugar con la longitud de la balda superior o con la posibilidad de optar por un modelo con más de una balda adicional para colocar objetos decorativos: un jarrón, portafotos, recuerdos de un viaje, etc.
En cuanto a estilos decorativos, como siempre, hay de todo y para todos. Los amantes del estilo rústico encontrarán en nuestro catálogo muchos modelos de madera en color nogal, roble o natural con acabados mate o satinado, perfectos para aportar calidez y elegancia a la decoración.
Pero no son los únicos que están de enhorabuena. También disponemos de una interesante variedad de mesas de TV industriales, realizadas en su mayoría en hierro y madera, como mandan los cánones de esta corriente decorativa en claro auge. Y qué decir de los muebles de televisión vintage, entre los que encontrarás preciosos modelos decapados, patinados y desgastados para prestar a la sala de estar un encantador toque retro.
Por supuesto también tenemos opciones para los amantes del estilo contemporáneo. Los muebles para TV de las colecciones Bruno y Balford dan buena muestra de ello. Y tampoco conviene obviar los muebles de estilo escandinavo, característicos por sus patas inclinadas y relativamente altas, que darán a la principal estancia de la casa un sofisticado aire nórdico, independientemente del color con el que hayan sido acabados.
En definitiva, el típico mueble grande de comedor con hueco para el televisor ha desaparecido, pero el mercado nos ofrece opciones mucho mejores y más variadas que, además, nos permitirán ganar una gran cantidad de espacio. Cuál de ellas elegir dependerá, como siempre, de tus gustos y necesidades.