Seamos o no veganos/as, es innegable que el veganismo está cada vez más de moda. Y no hablamos de comer o no alimentos de origen animal. El veganismo es un estilo de vida en sí mismo que, por supuesto, influye también en la decoración de la casa. Eso sí, cabe decir que no es un estilo decorativo en sí mismo, por lo que, en mayor o menor medida, es compatible con cualquier de ellos: vintage, rústico, colonial, nórdico, contemporáneo...
La decoración vegana apuesta por usar exclusivamente muebles, textiles y accesorios libres de rastros animales o que hayan usado a estos en el algún momento de su proceso productivo. Y aunque en principio pueda parecer complicado, no lo es tanto, ni mucho menos. Aquí van algunos tips para una decoración vegana, sostenible y saludable en general:
Sin seda, lana, ni pieles: textiles vegetales o sintéticos
Los textiles de la casa (ropa de cama, cojines, almohadas, fundas del sofá, tapizados, etc.) de seda, lana, pieles, pelo animal o plumas pueden sustituirse sin problemas por una gran variedad de alternativas: algodón, poliéster, piel artificial, viscosa, nailon, lino... Las opciones de origen no animal son infinitas.
Muebles de materiales ecológicos
Los muebles reciclados son todo un trend entre los veggies. No obstante, también se puede optar por muebles de madera y/o aglomerado realizados con procesos de tala controlada, de bambú (es una herbácea que brota muy rápidamente cada año, incluso si se tala) o de prácticamente cualquier material (sintético o no) realizado con procesos 100% ecológicos y para nos lo que se haya utilizado ningún animal.
Las 3 erres: reducir, reutilizar y reciclar
Las 3 erres ecológicos también valen para una decoración vegana. De ahí que sean en este sentido sean especialmente interesantes los muebles retro, y ni mucho menos se les haga ascos a los muebles decapados, puesto que independientemente de la antigüedad real de la pieza en cuestión, son un claro guiño a la cultura del reciclaje.
Cestos, centros y bandejas de fibras naturales
Ni que decir tiene los problemas que a medio y largo plazo produce el plástico y sus derivados en nuestro medio ambiente, por lo que en cestos, centros de mesa y bandejas se recomienda optar por modelos hechos con fibras naturales (mimbre, ratán, etc.) o, por supuesto, madera reciclada.
Velas de cera vegetal
La mayoría de las velas están hechas con cera de abeja o parafina, cuyos componentes derivan del petróleo y otros productos químicos muy contaminantes. La alternativa vegana son velas de cera vegetal, principalmente la candelilla y la carnaúba, que además de prestarse a un montón de bonitos diseños, son biodegradables y respetuosas con el medio ambiente.
Plantas por doquier
Las plantas suelen tener un papel importante en las casas de los/as amantes de la naturaleza. Es una de las mejores formas de sentirse en contacto con ella dentro del propio hogar. Siempre con mesura y sentido común, las plantas darán vida a la cocina, el recibidor, el salón, el dormitorio o a cualquier otra estancia.
Luz natural a raudales
La luz natural es una de las grandes protagonistas en estas casas. No en vano, la luz natural es fuente de vitamina D, mejora el estado de ánimo y contribuye a que el hogar luzca más bonito y saludable. Por ello, la decoración vegana y ecofriendly en general aboga por grandes ventanales y acristalados, así como por ambientes más bien abiertos para permitir el paso de la mayor cantidad de luz que sea posible.
Si no lo eres, no tienes por qué hacerte veggie de la noche a la mañana, ni seguir a rajatabla todas estas ideas. Solo con que apliques alguna de ellas ya estarás poniendo tu pequeño granito de arena para que nuestro planeta sea un poco más sostenible. Y eso siempre será bienvenido.